Un proyecto demorado

Hace ya un tiempo que escribí: “son tantos proyectos...” Pues aquí presento uno de ellos. A pesar de la rudimentaria herramienta que dispongo, como veréis en las imágenes, los resultados son satisfactorios. Muchas veces, no hay que obsesionarse con herramientas sofisticadas, de uso más bien profesional, si la vas a usar tres veces al año. Como es mi caso, al disponer de tiempo más bien escaso, junto con el bolsillo que también va escaso, en estos tiempos que corren. 
Bueno sin más dilataciones, aquí os presento un mueble en hierro, para la tabla de planchar:

Lo primero que hicimos, fue cortar casi todo el material a la medida, yo los suelo enumerar y ponerle lo que mide, para saber en donde va. Algunos cortes los dejamos para el final, para un mejor ajuste.

Ahora viene la parte más importante, que es puntear  y escuadrar.

Una vez bien punteado y escuadrado, lo soldaremos todo.

Como quería un mueble, mas bien ligero, en cuanto a peso y dimensiones. Opte por quitarle una balda y ponerle tres varillas huecas (tubo diámetro 8 mm), de aluminio. Que será el lugar en donde dejaremos el calzado, cuando nos cambiemos de ropa.

Para colocar las varillas de aluminio, lo que hicimos fue marcarnos en el perfil en donde queríamos las varillas y les hicimos tres agujeros NO PASANTES a los travesaños y las colocamos a la vez que lo íbamos punteando. Hay que cortarlas con unos centímetros de mas, si no corremos el riesgo de al no ir soldadas, al moverlas se salgan de sus agujeros.

“Y como movemos todo esto, ¿para cuando tengamos que fregar o barrer? Muy fácil cariño con cuatro ruedas, todas ellas con freno.”

Le tuvimos que hacer unas patas supletorias, para ganar estabilidad. Y en ella colocar las ruedas. Tras varios dibujos y algún corte de prueba (tenía varios bocetos pero no me gustaba el resultado final), optamos por unas simples pletinas taladradas, con agujero pasante diámetro 8 mm.

 Estas varillas, que usaremos de tiradores, recomiendo ponerlas cuando punteemos todo antes de soldar, puesto que con el calor la estructura tiende a cerrase en la parte alta, y luego si no nos gusta, se pueden quitar.

Soltamos la tabla de planchar, de su ya antiguo soporte y la colocamos sobre el mueble, para ello colocaremos estas pequeñas piezas:

Parte de atras (Plancha)

Parte delantera (Punta)

 Pudiendo de esta manera dejarla a la altura, que mejor nos  convenga, porque dependiendo de la altura de las ruedas puede darnos diferentes medidas.

 Aquí os dejo un dibujo en 3d de cómo era la idea original. No lo he acotado, puesto que no todas las tablas son iguales. Y con la distribución de los huecos pasa lo mismo, a gusto de cada cual.

Pinchar en la imagen.

Galería fotográfica del antes y después :

Agradecimientos:

* Logística y debate de ideas, Padre Luis.

* Dedicado con cariño aquellos que no supieron  ver , ni apreciar, mis habilidades a la hora de trabajar.